Ciertas empresas tecnológicas han encontrado en el crowdsourcing una manera eficiente de solucionar los inconvenientes que puedan generar a sus clientes. Este ha sido el caso de Microsoft, que lanzó una versión beta se su software Windows 10, con el fin de obtener feedback para mejorar la experiencia del usuario.
Facebook ha readaptado esta técnica, ofreciendo compensaciones económicas para que desarrolladores de todo el mundo encuentren brechas de seguridad y fallos.
Gracias a esta técnica, y 1,3 millones de dólares después, se han podido corregir más de 400 bugs. Si varios de estos fallos no se hubiesen identificado y corregido, podrían haber supuesto problemas de seguridad y fallos en la protección de datos personales.
Este puede ser el ejemplo que demuestra que en temas de seguridad informática, los beneficios de prevenir son muy elevados.